miércoles, 7 de diciembre de 2011

La Quema del Diablo, Feliz dia del Locutor y Deportista



By: BenjiM@r
12/0/11 USA 
Feliz dia del Locutor y el Deportista







       
Hoy 7 de Diciembre se celebra la Quema del Diablo, una celebración mágico-religiosa Guatemalteca. Su origen parece ser más legendario que real y tiene su base en la fiesta de Concepción. La Quema del Diablo se ha convertido en tema de discordia entre la población.

La quema del diablo es una celebración mágico-religiosa Guatemalteca. Su origen parece ser más legendario que real y tiene su base en la fiesta de Concepción.
Dado que esta fecha se encuentra exactamente a nueve meses del memorial del nacimiento de la Virgen María y coincide con la celebración del adviento del nacimiento de Cristo se realiza una limpia espiritual en la que por medio del símbolo de la basura se pretende alejar toda impureza quemando fogatas con basura o figuras del diablo de papel que simboliza el mal. La fiesta es criticada por grupos ecologistas que la ven como un foco de contaminación y por grupos protestantes que la consideran sin fundamento una adoración al diablo.
La Quema del Diablo es una tradición muy guatemalteca.
La intención de las fogatas era la de iluminar el camino de la procesión de la Virgen de Concepción, a la víspera del día de su fiesta (8 de diciembre). La Quema del Diablo representa el triunfo que la Virgen Inmaculada Concepción sobre Lucifer, es decir la victoria del bien contra el mal.
La Quema del Diablo es el acto por medio del cual, según la tradición guatemalteca, el pueblo rechaza el mal y espera las fiestas de la Virgen de Concepción.  Considera que el Diablo se esconde entre las cosas viejas que se encuentran en los hogares y por ello se deben sacar y quemar, así se le echa de la casa.  La tradición se remonta a la época colonial. En ese entonces, al no existir el alumbrado eléctrico, muchos guatemaltecos asistían a la procesión de la Virgen de Concepción y para alumbrar su camino quemaban “chiriviscos” -conocidos como luminarias- en la víspera de su fiesta (8 de diciembre).
En los últimos años se ha popularizado también la quema de unos diablillos de papel rojo, moldeados sobre estructuras de alambre, a semejanza de las piñatas de las fiestas de cumpleaños.
Tema de discordia
Actualmente, la Quema del Diablo se ha convertido en un tema de discordia entre la población, con algunos grupos radicales demandando el fin de la tradición. El punto central de discusión es el uso de materiales que riñen”con la tradición y cómo estos nuevos materiales afectan a la salud.
Es importante mantener una cultura de tolerancia para construir nuestra identidad, velando siempre por el bienestar de los demás. Al fin y al cabo el mensaje de las religiones judeo-cristianas y en general de todas las religiones es: Amor y respeto al prójimo y no dañar a nadie. Debemos pues preocuparnos por los materiales que usamos para la conmemoración, evitando la quema de objetos plásticos, llantas y otros productos nocivos que generan contaminación atmosférica, partículas de hollín, cadmio, arsénico, plomo y zinc.
El plástico produce dioxinas, que son los productos más tóxicos que el hombre ha producido  y que provocan cáncer, alteración de las defensas del organismo y afectan el sistema reproductor.  El Cadmio y el Zinc son metales pesados persistentes en el ambiente y si son absorbidos por el organismo humano pueden permanecer por dé­cadas antes de ser excretado. En humanos, la exposición prolongada se relaciona con el mal funcionamiento de los riñones. También puede ocasionar enfermedades pulmonares, entre las que se encuentra el cáncer de pulmón y ocasionan osteoporosis en humanos y animales.  
La exposición al plomo puede tener diversos efectos en humanos ya que puede afectar la formación de hemoglobina, la fun­ción renal, el tracto gastrointestinal, las articulaciones y el sistema nervioso.
La exposición al Arsénico puede ser a través de la comida, el agua y el aire.  Puede causar varios efectos sobre la salud, como irritación del estómago e intestinos, disminución en la producción de glóbulos rojos y blancos, cambios en la piel, e irritación de los pulmones.
El otro elemento a considerar es la quema de cohetillos, pues la pólvora al quemarse provoca que el azufre, que es uno de sus componentes reaccionen con el aire para producir gases tóxicos como los óxidos de azufre que provocan alteración de la circulación sanguínea, daños cardiacos, efectos en los ojos, desórdenes estomacales y daños al sistema reproductor.
Multas e incendios
El Acuerdo Ministerial 332-2004 del 24 de junio 2004 prohíbe en forma terminante la quema indiscriminada de llantas y neumáticos en cualquier lugar público o privado.  La infracción se puede sancionar con multas entre mil a cinco mil quetzales, las que pueden duplicarse en caso de reincidencia.
Grupos ecologistas invitan a los capitalinos a no quemar hule, plásticos y otros combustibles que ocasionan mayores grados de polución.
Los llamamientos están dirigidos también a prevenir accidentes, ya que, muchos de los incendios registrados en Guatemala durante el año ocurren este mes.

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